El asesinato de Jaroslaw Bielawski de 62 años, volvió a encender las alarmas de temor y preocupación entre los taxistas de la ciudad, su cuerpo fue hallado muerto con un tiro en la cabeza en el sector de Long Island City, muy cerca de la base para la que laboraba en Queens.
Sus compañeros hispanos del volante aseguran que una vez más el robo es el motivo para que se incremente el número de víctimas de la delincuencia. La policía está tras los pasos de dos sospechosos y todavía no se han registrado arrestos.
Los investigadores informaron que Bielawski fue encontrado con un disparo de bala a la altura de la cien, junto a su carro, un Lincoln Town estrellado, siendo trasladado al Cornell Medical Center donde minutos más tarde fue declarado muerto.
Agregaron que testigos dieron cuenta a la uniformada de dos sospechosos merodeando por el sitio en un carro color café.
Según detalles de la policía, la víctima habría forcejeado con sus atacantes, lo que provocó que estrellara el automotor cerca a la base Cross Corporate Transportation donde laboró por más de 10 años y que está localizada en el 35-44 de la 11 calle en Long Island City.
Los directivos de la base de servicio de taxis y Limosinas declararon a NY de Día que Jaroslaw Bielawski lo recordarán como un buen trabajador”
Nunca pedía vacaciones, para él no había descansos, llevaba mucho tiempo con nosotros, tiene 4 hijos y su esposa, vivía en Brooklyn. Casi nunca llevaba consigo mucho dinero, quizá lo que había hecho durante el día fue lo que atrajo a los ladrones, como es alto y fortachón les dio problemas para lograr sus fechorías y los cobardes lo mataron de la forma miserable que lo hicieron, ojala encuentren a los responsables” manifestó Robert Montgomery, presidente de la Base.
“Es terrible lo que está pasando los últimos días con nosotros los taxistas tenemos muchos problemas en la calle, hay personas que salen como de cacería, aquí hay mucha comunicación con la base, siempre por seguridad tenemos cámaras, espero que hayan evidencias que puedan dar con los delincuentes que no entienden que somos padres de familia que salimos a buscar la forma de ganarnos la vida” expresó Logan Martínez.
“Usted no sabe cuántas historias y peripecias tenemos que pasar, quienes trabajamos en la noche sobre todo, hay ocasiones que supuestamente perdemos de ganarnos una carrera porque vemos que la persona que está solicitando nuestro servicio nos provoca sospechas, pero lo hacemos porque nos esperan en casa, es un trabajo riesgoso pero no hay de otra” dijo Carlos Morales oriundo de Guerrero, México y quien ya ha tenido que sortear un par de ocasiones de ser asaltado.
Tomado de:
Edison Esparza
NY de Día
Nueva York