El Presidente de la Liga de Béisbol Profesional de la República Dominicana, doctor Leonardo Matos Berrido, deploró el incidente ocurrido en el partido de béisbol celebrado este sábado en el Estadio Quisqueya, entre los equipos Tigres de Licey y Gigantes del Cibao, en medio del cual el dirigente azul José Offerman derribó de un puñetazo al árbitro auxiliar de primera base, el norteamericano Daniel Reyburn.
El doctor Matos Berrido dijo que “la Liga Dominicana, sus asociados y sus dirigentes piden encarecidas excusas a la fanaticada nacional y a todo el pueblo dominicano, que tanto apoya el béisbol, por ese lamentable hecho, inexplicable e injustificable en un evento deportivo que, resultado de un arduo trabajo de décadas, ha alcanzado los más altos niveles de calidad en la región del Caribe y en el mundo”.
Agregó que la liga cumplirá con su obligación de ofrecer la asistencia jurídica que el árbitro agredido requiera y recordó que los árbitros extranjeros que actúan en los campeonatos que organiza la entidad vienen al país en virtud de un acuerdo que existe con la National Association de los Estados Unidos y que espera que este lamentable hecho no afecte las buenas relaciones que durante años han existido entre las dos organizaciones, las cuales no se limitan a proporcionar los árbitros extranjeros que requiere nuestro béisbol sino que provee supervisión y adiestramiento para todos los árbitros, nacionales y extranjeros.
Expresó que actualmente la National Association asesora en la organización de una escuela para árbitros que deberá iniciar sus operaciones en el mes de febrero con el patrocinio de la Lidom y de la Liga de Verano de la Republica Dominicana, entre otras entidades.
La liga, afirmó, está obligada a garantizar la integridad física y los derechos de los árbitros que actúan en sus campeonatos, sean nativos o importados, y como entidad seria no vacila un solo instante en cumplir con sus responsabilidades, adoptando las medidas que las circunstancias demandan.
Matos Berrido relató que el viernes pasado, apenas un día antes del incidente, en presencia de don Pepe Busto y de Fernando José Ravelo, presidente y gerente general del equipo Licey, respectivamente, aconsejó a José Offerman, al percibirlo sumamente excitado, a proceder con sangre fría y actuar con comedimiento y espíritu deportivo para que pudiera servir de ejemplo positivo para los jugadores del equipo que comanda. Dijo que presenció con estupor el incidente desde las gradas, y que es insólito que la pasión deportiva llegue entre profesionales a las expresiones de intolerancia y de violencia exhibidos por un atleta de éxito en su carrera, a quien muchos dominicanos admiran y quieren.
Aseguró que la falta será sancionada conforme a lo que disponen las reglas oficiales del béisbol y las normas internas de la Liga de Béisbol Profesional de la República Dominicana.
Tomado de DH