LATIN FACES
POR: Enrique Rojas
KISSIMMEE, Florida — El contrato que Joe Mauer acaba de firmar con los Mellizos de Minnesota tendrá repercursiones en el resto del béisbol, especialmente en las situaciones de las estrellas de equipos de mercados medianos y pequeños que se acercan a la agencia libre.
También en las vidas de los receptores venezolanos Víctor Martínez y Jesús Montero, pero ese asunto lo tocaremos al último.
Hasta el domingo, “lo sentimos, pero no tenemos esa cantidad de dinero” era la excusa perfecta de 20 de los 30 clubes de las ligas mayores para dejar marchar a sus estrellas jóvenes una vez se acercaban a la libertad de escoger patrones.
Minnesota, uno de los mercados menos favorecidos del béisbol, acaba de otorgarle a Mauer, uno de los mejores jugadores de la actualidad, uno de los contratos más caros de la historia dos semanas antes de inaugurar el estadio más nuevo de Grandes Ligas.
Mauer, un catcher triple campeón de bateo y doble Guante de Oro, ganará $184 millones de dólares por las prpoximas ocho temporadas, un promedio de $23 millones anuales.
Solamente Alex Rodríguez ($27,5 millones anuales por 10 años) supera el promedio anual en salario de Mauer. En total de dólares, apenas A-Rod y Derek Jeter ($189 millones por 10 años), ambos con los Yankees de Nueva York –el equipo más rico del deporte– han firmado contratos mayores.
El contrato de Mauer no solamente afectará (pueden cambiar esta última palabra por “elevará”) el valor del inicialista dominicano Albert Pujols, sino que además pone a los Cardenales de San Luis en una situación incómoda para usar “lo sentimos, pero no tenemos esa cantidad de dinero” en las negociaciones con el mejor jugador del béisbol.
Igualmente, aunque en menor escala, el negocio de Mauer incidirá en las decisiones que deben tomar San Diego, en un futuro cercano, con el inicialista mexicano Adrián González; Tampa Bay con el jardinero Carl Crawford y el inicialista dominicano Carlos Peña; Kansas City con el puertorriqueño David DeJesús y Florida con el antesalista mexicano Jorge Cantú, entre otros.
Mauer es un jugador especial y Minnesota decidió que cualquier precio vale la pena para retenerlo en la ciudad, incluso cuando la franquicia no está en capacidad de producir beneficios a la par de sus colegas de Nueva York, Chicago, Los Angeles y un par de lugares más.
Vamos a ver que tienen para decir a sus estrellas otras franquicias de mercados modestos, pero les aseguro que “lo sentimos, pero no tenemos esa cantidad de dinero” será menos usado en los próximos años.
Por otro lado, con Mauer fuera de la pintura de la agencia libre, Boston y Yankees deben seguir adelante para asegurar la posición No. 2.
Martínez jugará la última temporada del contrato que firmó originalmente con Cleveland en abril del 2005 y podrá declararse agente libre al final de la Serie Mundial. Es muy probable que la firma de Mauer acelere las conversaciones para una extensión entre Martínez y los Medias Rojas.
En el caso de los Yankees, pese a tener en las ligas menores al mejor prospecto de la receptoría de todo el béisbol, sus sueños apuntaban a enganchar a Mauer el próximo invierno para sustituir al puertorriqueño Jorge Posada, quien irremediablemente tendrá que ser usado mayormente como bateador designado en el 2011, cuando finaliza su actual contrato.
Ahora que Mauer fue declarado Mellizo de por vida (al menos de vida útil detrás del plato), no hay razón para seguir dilatando el ascenso de Montero al Bronx.