Los Mets de Nueva York están pasando ‘las verdes y las maduras.
POR ANTONIO ANDRAUS BURGOS
Buena parte, ha sido producto de las lesiones, algo natural en los deportes. Otra cuota, el bajo rendimiento ofensivo. Y, finalmente, los errores mentales y reales en los partidos cruciales, le han cambiado la fisonomía a más de un juego.
Que los Mets de Nueva York estén pasando ‘las verdes y las maduras’ con semejante nómina que tiene, cuyo costo supera los 300 millones de dólares al año, no es cosa que se pueda explicar.
Y qué decir de los Yanquis de Nueva York, con toda su tropa diezmada fisicamente y alicaída con el bateo; o de los Padres de San Diego, que han invertido una inmensa fortuna para buscar su primera corona del Clásico de Otoño; o ver en el frío sótano a los Cardenales de San Luis, un equipo batallador que está de capa caída; o mirar con profundo análisis deportivo, del por qué los Mellizos no han jugado la pelota que se esperaba de ellos; o por qué los Marineros de Seattle no están dando la batalla; y, finalmente, porque los inspirados Filis de Filadelfia, están por fuera del hilo ganador hasta este momento.
Es que no puede haber consenso posible cuando se mira con detenimiento, del por qué de las causas que han mermado la capacidad de juego de esas novenas, porque son cosas sobre las cuales no existe control alguno y se sale de las manos de los dirigentes y los capataces de las novenas. Las lesiones hacen parte del juego y de las vicisitudes que hay que afrontar en la temporada.
Lo que hay hasta el receso
Después de un fabuloso comienzo de campaña del entonces casi imbatible equipo de los Rayas de Tampa, de la noche a la mañana empezaron a ceder terreno y ahora, en este momento, los Bravos de Atlanta es la novena a derrotar. Así es el béisbol.
Casi todos los equipos han llegado a 90 partidos jugados en la temporada, y hasta el momento del receso, con motivo del Festival de Jonrones y del Juego de las Estrellas, lo que hay de cierto, es que los clasificados para la postemporada, si concluyera con las tablas de posiciones actuales de las dos ligas, dejaría por fuera a muchas franquicias que estaban señaladas para ir más lejos.
Por ejemplo, en la Liga Americana, los equipos líderes en sus respectivas divisiones son: los Rayas en el Este, con 58 triunfos y 35 derrotas; los Guardianes, en la Central, con 45 y 45; y los Vigilantes, en el Oeste, con 52 y 39.
Mientras que en la Liga Nacional, los equipos líderes en sus respectivas zonas son: los Bravos, en el Este, con 60 ganados y 29 perdidos, el mejor equipo hasta la mitad de temporada; los Rojos, en la Central, con 50 y 41; y los Cascabeles, en la zona Oeste, con 52 y 38.
Si la temporada terminara con las posiciones que hay hoy en el receso de mitad de año, a la postemporada irían por la Liga Americana: los Rayas, los Orioles, los Azulejos, los Guardianes, los Vigilantes y los Astros.
Y en cuanto a la Liga Nacional, irían a la postemporada: los Bravos, los Marlins, los Rojos, los Cerveceros, los Cascabeles y los Dodgers.
De tal manera que los Mets, los Yanquis, los Padres, los Cardenales, los Mellizos, los Marineros y los Filis, favoritos antes de empezar la campaña, para ir a la vuelta de octubre, están, en este momento, por fuera.