Todos los participantes del campeonato han dado alguna vez con sus huesos en el suelo durante el año. Esta marca supera en 18 las 876 que hubo en el certamen de 2008 y en nada menos que 261 las del 2000
Las caídas forman parte del motociclismo y los pilotos lo asumen como un riesgo inherente a su profesión, al que deben enfrentarse cada vez que se suben a la moto e intentar bajar los tiempos en un entrenamiento, frenar un poco más tarde para adelantar al rival que les precede o marcar un ritmo que quizá está por encima de las posibilidades que le otorga el tándem moto-piloto. O simplemente por una pista mojada, una línea blanca deslizante, una curva húmeda mal señalizada o, en alguna ocasión, la imprudencia o temeridad de alguno. Muchas son las posibilidades para que un piloto dé con los huesos en el asfalto.
Pero el Mundial 2011 ha superado todos los anteriores, ya que esta temporada se han batido todas las marcas de caídas hasta la fecha. Nada menos que en 894 ocasiones un piloto se fue al suelo, sumando todas las sesiones de entrenamientos libres, calificatorios y carreras de las tres cilindradas. Comparándolo con otros años, vemos que son 18 más que en 2008, hasta ahora el que más caídas había tenido, con 876. Y nada menos que 261 más que en el 2000. Un récord nada plausible e incluso triste el de 2011, pero al fin y al cabo, un récord.
Si seguimos desgranando los datos de la temporada, nos encontramos con algo bastante curioso. En Moto2 se han producido 421, por las 157 de MotoGP y las 298 que hubo en 125cc. Es decir, la categoría intermedia se lleva el 47,09 % del total. Bien es cierto que es donde hay más pilotos en la pista y que han sido las carreras más disputadas en general, pero casi una caída de cada dos que se han producido en total es mucho.
Si lo analizamos por circuitos, el GP de Holanda se lleva la palma. En Assen la lluvia ayudó para que hubiera nada menos que 78 caídas durante el fin de semana. Jerez, también con el líquido elemento como invitado, tuvo 71, las mismas que el GP de Malaisia, aunque en este caso el asfalto de Sepang estaba completamente seco. En la parte contraria está Mugello con tan sólo 25 y ninguna caída entre la nómina de pilotos de MotoGP. Laguna Seca cierra la clasificación, pero al únicamente disputarse la categoría reina no debe compararse con el resto de pruebas del calendario 2011.
Y el lugar concreto más peligroso durante la temporada ha sido la curva 1 de Estoril (Portugal) con 22 caídas, seguido por la curva inicial de Sepang con 17 y la curva 5 de Montmeló, con 16. En definitiva, las caídas serán siempre inevitables y, por suerte, en 893 las consecuencias se quedaron en poco, pequeños sustos, otros más grandes y lesiones varias. Lamentablemente, una de ellas acabó con la vida del piloto de 24 años Marco Simoncelli, en Malaisia.