AMISTOSO | PHILADELPHIA 1 – REAL MADRID 2
El Madrid regresa con tres victorias y tres tantos de promedio. Nota alta de los fichajes. Callejón y Özil, goleadores en Filadelfia. Kaká volvió a decepcionar
Fotos:Cesar Rivera y Daniel Budasoff
El Madrid cerró ayer el telón de su gira americana. Ante los Galaxy (1-4) dejó muy buenas sensaciones, con un Coentrao brillante de extremo y mediocentro. Frente al Chivas, se notó el cansancio, pero emergió el insaciable Cristiano para hacer un hat-trick en nueve minutos y finiquitar el partido (0-3). Y ayer, el Madrid aceleró en los diez primeros minutos, marcó dos goles, sesteó y ganó con lo justo. Tres victorias, nueve goles a favor y dos en contra. Final feliz, pero con un último examen para no confiarse
El primer rival que se encontraron ayer los blancos fue el calor. El partido se jugó a 36 grados con el 70% de humedad. Hubo dos futbolistas que aguantaron bajo este infierno los 90 minutos: Callejón y Benzema. Estos dos jugadores desequilibraron el partido en los diez primeros minutos. Si hubo un equipo que salió con la caraja fue el americano. En el 1′, Williams se comió un pase en largo de Xabi y la pelota cayó en las botas de Callejón, que no perdonó. El granadino ha tenido que derribar la puerta del primer equipo desde Barcelona.
No fue un jarro de agua fría para el Philadelphia, sino de aceite hirviendo. Nueve minutos más tarde, Benzema presionó a Valdes y consiguió robarle la pelota para dejarle en bandeja el 0-2 a Özil. El genio alemán hace fácil lo difícil y la pegó con la derecha como si fuera diestro de toda la vida. Al de Gelsenkirchen sólo le hacen falta un par de detalles de este tipo por partido. La competencia se lo pone fácil. Kaká le sustituyó tras el descanso, pero la sensación que ha dejado en estos dos últimos partidos (Philadelphia y Chivas) es la misma que en sus dos últimas temporadas. Decepcionante. Mal síntoma.
A partir del 0-2, el equipo se dejó llevar. Un vicio, el de relajarse, que fue uno de los fallos de la campaña pasada cuando el equipo perdió la Liga en estadios como el del Levante, Almería, Osasuna y Deportivo. La defensa fue un ejemplo de ello, pues permitió hasta seis ocasiones de peligro en la primera parte. Menos mal que Casillas, haga frío o calor, se mantiene siempre seguro. El delantero Ruiz se acostó anoche sabiendo por qué al de Móstoles le llaman el Santo. Califf y Letoux tuvieron dos oportunidades claras que mandaron fuera. Aunque al Madrid le birlaron dos penaltis (a Arbeloa y Benzema) en la primera parte…
Y tras el descanso, la imagen del portero Mondragón pidiendo a un fotógrafo tomar una instantánea con Cristiano, retrasando el comienzo de la segunda parte, describía muy bien ese ambiente lúdico-festivo. En el Madrid hubo siete cambios. Jesé se marchó del partido sin pena ni gloria. Lástima, porque hay ganas de ver a este chaval en acción.
Prueba.
Mourinho optó por experimentar con gaseosa de pretemporada: Pepe y Coentrao en el doble pivote. Una vertiente menos creativa que Xabi-Granero y con un resultado destructivo. Cristiano se vio perjudicado. Intentó el gol desde el primer minuto en tres ocasiones diferentes, pero no tuvo suerte. El Philadelphia se vino arriba con un golazo de vaselina de Farfán y el centro del campo blanco no fue capaz de contener el empuje de un equipo que despertó. Tomás Mejías, que debutó en esta gira junto a Jesús, evitó un disgusto mayor.