Atrás quedó el vestido de cisne que lució Björk hace algunos años, el mismo que la coronó como la más extraña de todas las intérpretes. El 2009 se caracterizó por un desfile de estrellas cuya moda, más que moda, era un grito de guerra no apto para las damas cívicas.
Sin duda, el mundo pop estuvo bien representado por Rihanna y sus innumerables cortes de pelo, hombreras, tatuajes y zapatos raros.
La onda “world” no se quedó atrás, siendo representada por M.I.A. de Sri Lanka, que causó furor luego del éxito de “Slumdog Millionaire”. Sin hacerse esperar, Marc Jacobs la tuvo como protagonista en una de sus campañas de moda y en este año, hasta la prestigiosa revista Time la nombró una de las 100 personas más influyentes en su codiciada lista.
Pero sin lugar a dudas, la que arrasó este año fue Stephanie Joanne Angelina Germanotta, mejor conocida como Lady Gaga, que dejó gagos a todos los críticos de la moda. Ciertamente, la chica tiene talento y personalidad, pero ha sido su extraño e impredecible look el que le sigue abriendo puertas internacionalmente y tiene a sus fans arrebatados de pasión por ella. Un día el cabello es rosado, otro día utiliza una máscara, al día siguiente exhibe su sostén, y así sucesivamente, Lady Gaga no se cansa, y nosotros no nos cansamos de su entretenimiento. Seguramente, en el 2010 esta chica seguirá dejando a todos con la boca abierta.