Menos de diez minutos, pero con una emoción que se veía en el rictus de un Carlos III que pronunció este Viernes su primer discurso como rey de Inglaterra tras la muerte de su madre Isabel II. Pese a la brevedad, su exposición estuvo llena de promesas, de recuerdos y de menciones para toda su familia. Desde Camila, su mujer que ahora será reina consorte, hasta sus hijos y sus nueras.
“Querida mamá, mientras inicias esta última ruta con mi querido papá solo quiero decir esto: gracias“, dijo ya casi al final de sus palabras, en un momento en el que se despidió de ella pidiendo que esté acompañada “por los ángeles”. Además, prometió “trabajar a la luz de su ejemplo” y reinar de por vida “con lealtad, respeto y amor”.
Para las nuevas responsabilidades de Carlos III una figura importante es la de su esposa. “Es un tiempo de cambio para mi familia y cuento con el apoyo de mi mujer Camila”, comentó. En ese repaso familiar, el rey también tuvo palabras de valor y agradecimiento para el príncipe Guillermo y su mujer Kate, y una cariñosa mención para Harry y Meghan.
Los primeros, de hecho, heredan las que hasta ahora eran sus responsabilidades. “Los nuevos príncipes, lo sé, van a seguir inspirando nuestro progreso como país”, expresó el recién proclamado monarca británico. “También quiero expresar mi cariño para Harry y Meghan”, dijo, en una breve mención al matrimonio, que por decisión propia mantiene desde hace tiempo una vida alejada de la agenda real.
Hasta ahora las responsabilidades como príncipe eran unas muy diferentes a las que asumirá como rey. Y Carlos III lo sabe. De hecho, en el discurso hizo mención a su labor en el plano de la caridad y de ayuda a los más vulnerables. “Pero sé que hay otros que las continuarán”, aseguró.