La más importante Central sindical norteamericana, AFL-CIO, acaba de votar en el marco de su congreso nacional, en la norteña ciudad de Pittsburgh, una resolución donde no solo reclama el final de las restricciones para viajar a Cuba aplicadas al conjunto de los ciudadanos norteamericanos sino que exige el levantamiento inmediato del bloqueo contra la Isla.
La resolución presentada al congreso bajo el número 44, ha sorprendido a muchos, pues la AFL-CIO —Federación Estadounidense del Trabajo- Congreso de Organizaciones Industriales—, es conocida por sus posiciones conservadoras e incluso por su afiliación a la CIA en materia de injerencia.
La resolución reconoce la ineficiencia del bloqueo “más duro” jamás mantenido por EE.UU. “en contra de cualquier país en el mundo” y que la ONU ha “votado 17 veces en su contra”.
Se señala además que la actual política norteamericana hacia Cuba es un impedimento para el desarrollo de las relaciones de EE.UU. con el resto del continente, que numerosos presidentes de países latinoamericanos y del Caribe han visitado a Cuba últimamente y que la Cumbre de las Américas de Trinidad y Tobago condenó el bloqueo.
El texto precisa que numerosos congresistas ya han denunciado el “impacto negativo” para Estados Unidos de las legislaciones anticubanas existentes, además de proponer legislaciones para poner fin a todas las restricciones de viaje a Cuba.
La AFL-CIO es la mayor federación sindical de Estados Unidos. En el congreso de Pittsburgh, un ex minero del carbón ha sido designado su nuevo presidente. El casi monopolio sindical cambia de dirigente principal por primera vez desde hace 14 años.